HA LLEGADO EL CIRCO!

Estaba pensando en renovar el artículo de la India que relaté hace un par de años y que ha tenido el blog bloqueado...pero no estoy inspirado...¿sobre qué escribo? ¿qué os cuento?....después de un larguissimo periodo parado, debo encontrar el momento y es....¡ahora!; el artículo de la India es de 2007...fue un viaje alucinante: tierra, olores, gentes que me cautivaron; seguro que volveré. Seguro.
En fin, como os decía, voy a intentarlo...Es dificil elegir un tema cuando no sabes de qué hablar, pero algo saldrá; siempre tiene sentido el negro sobre blanco y alguien lo leerá (yo, seguro)! estaba leyendo y releyendo el blog de Txema (un amigo mío), K, www.sameidan.blogspot.com , y la verdad es que me gusta; me gusta como escribes Txiri y me gustan tus vicios secretos y aficiones; es más, me gusta y envidio tu modus vivendi...pensionista menor de edad recubierto de cultura, viajes exóticos y pasión por la cerveza!! Quién pudiera, Txiri!, quien pudiera . Quizás tú pienses al revés y anheles tener una vida "conservadora", "ordenada" y "estable" como la mía...o no. Up to you. ¿La cuestión? No estar nunca conforme con lo que tenemos; estar incómodo y querer siempre lo de los demás...pero, ¿que no sabemos que los demás también recelan de lo suyo?...qué complicados somos, ¿verdad? En fin, que me encanta tu blog y como escribes. Jo, de gran, vull ser com tu.
Estamos en Navidad, fiestas religiosas por excelencia, y no he pisado ni el cine, ni el teatro; sólo salí a cenar fuera un día, bueno, una noche...compromiso profesional...estuvo bien...Contaros que la gran actividad de estas fiestas ha sido una tarde en el circo. Lo recomiendo sobretodo a los más pequeños y a sus responsables, obviamente. A pesar de esta recomendación, debo decir que no tiene nada que ver con aquél circo que recuerdo de mi infancia: no hay animales!!, la carpa es muy pequeña, los payasos pasaron de puntillas (¿¿pero no son ellos los reyes del show??); la percepción es que el espectáculo es menor, infimamente menor....quizás esté equivocado, porque de pequeño todo parece más grande; y de mayor, todo es más pequeño.
Eso sí, Aitana disfrutó de lo lindo la primera parte, luego, ya le cogió sueño, y empezó a refunfuñar: así que, se acabó el circo. Se acabó la función. Pero, el circo volverá, volverá como canta Sidonie. Me quedo con estas preguntas: ¿dónde están esos malabares sobre una fina cuerda sin red de protección? ¿y los elefantes? ¿y el domador de leones? ¿y los payasos?, ¿el listo, el tonto y el más tonto? El año que viene le preguntaré a Aitana qué le ha parecido el espectáculo...intentaré recordar qué sentimientos y sensaciones transmitía yo a mi abuelo, cuando, de niño, me llevaba a las Arenas....a ver qué conclusiones saco.
Sigo pensando....no sé sobre qué escribir...
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